PATOGENIA
Dos mecanismos de daño al colon:
uno mecánico y el otro inflamatorio e inmunoalérgico.
La lesión principal generada por los tricocéfalos es de carácter mecánico al penetrar a la mucosa la porción anterior del parásito. El traumatismo causado por el estilete produce inflamación, edema y hemorragias petequiales; la gravedad es directamente proporcional al número de los parásitos enclavados.
Aunque la histopatología sea diferente, la trichiuriasis crónica produce detención del crecimiento, tal como se ha observado en otras formas de colitis, principalmente la colitis ulcerativa.
La anemia hipocrómica de la trichiuriasis puede atribuirse a la combinación de la pérdida sanguínea por la mucosa inflamada, y las hemorragias petequiales, además de la ingesta de sangre por el parásito, y del balance de hierro trastornado por la enfermedad. Se ha estimado una pérdida de 0.005 mL de sangre, por lombriz, y por día.
En los niños con parasitación masiva se manifiesta la colitis disentérica y si la infección se extiende al recto puede haber prolapso de la mucosa, más frecuente en infantes mal nutridos y poliparasitados, la asociación con la amibiasis invasiva ulcerosa agrava las lesiones y los síntomas de la Tricocefalosis.
Diagnóstico de laboratorio:
(Examen de heces)
Revela huevos teñidos de bilis y con tapones polares.
Puede ser difícil detectar las infestaciones ligeras, debido a la escasez de huevos en las muestras de heces